Tras su paso por la despalilladora, los granos de uva son depositados en una mesa vibrante, de selección de grano, donde se eliminan partes de raspón que hayan podido quedar adheridos a las bayas, así como aquellos frutos que no cumplan con los parámetros visuales de calidad requeridos para nuestros vinos.
Tras una laboriosa selección de frutos, la uva se introduce, por gravedad, en el depósito donde llevará a cabo la fermentación alcohólica controlada.
La uva procedente de cada finca se elabora independientemente, lo que nos permite conocer las posibilidades de cada terroir y seguir la evolución de los vinos procedentes de los distintos terruños. Así cada año aprendemos de la tierra viendo y valorando los frutos que nos ofrece reflejados en nuestros vinos.
La bodega dispone de tres tipos de depósitos de elaboración, caracterizados por los materiales de construcción de los mismos:
-4 tinas de madera de roble francés de 8.000 litros.
-6 depósitos de acero inoxidable de 15.000 litros.